SIMULADOR

jueves, 27 de mayo de 2010

Usemos la Tecnologia para ayudar al medio ambiente




Las principales necesidades


Para continuar avanzando, se deben abordar  varias necesidades acuciantes: n crear y comercializar nuevas tecnologías  ecológicas perfeccionadas; n continuar el proceso paulatino de suplantación de tecnologías de etapa final por tecnologías de producción menos contaminante y ecoeficiencia, es decir evolucionar rápidamente de  la reducción de la contaminación a la prevención de la contaminación;

acelerar de forma general el conocimiento y    la adopción tanto de las nuevas tecnologías  ecológicas como de las existentes, en el sector industrial en su conjunto de los países industrializados y, principalmente, de los
países en desarrollo;  n implantar cambios de política que promuevan una aplicación más generalizada de las tecnologías ecológicas a nivel nacional y local; n fomentar la creación de tecnologías ecológicas a nivel local.

Un espectro amplio

¿Qué son las tecnologías ecológicas? Abarcan un espectro amplio de tecnologías de procesamiento  y de productos. Algunas, como  los generadores fotovoltaicos solares, los  dispositivos de fibra óptica, los vehículos  eléctricos o ultraeconómicos, y las soluciones por biotecnología, actualmente están disponibles aunque todavía no son lo suficientemente  económicas como para poder comercializarlas  a gran escala. En un futuro, éstas y otrastecnologías en ciernes remodelarán las pautas de producción y consumo, propulsarán a gran parte de la industria hacia la producción sostenible y, en su hora, lograrán que algunos sectores
industriales alcancen la meta de emisión cero.


Resultados sorprendentes


Gracias a las tecnologías ecológicas, la industria  ha venido mejorando y continúa elevando su  nivel de cuidado ambiental. Por ejemplo, los países industrializados han alcanzado logros medioambientales muy importantes durante los últimos 20-25 años, período durante el cual sus economías han crecido un 80%. Los países industrializados representan el 80% del mercado de los productos ambientales. El costo ha sido
de entre el 0,8% y el 1,5% del producto interno bruto (PIB), sufragado tanto por el sector privado como el público. Es cierto que muchos problemas ambientales persisten –y en algunos casos están empeorando–, pero esto, lejos de desmerecer lo que ha logrado la industria, pone de manifiesto lo que aún queda por hacer.


Un tema de especial complejidad es la  transferencia de tecnología a los países en  desarrollo. Como informó el Departamento de  Información Pública de las Naciones Unidas  ante el período extraordinario de sesiones de la  Asamblea General, si bien se ha logrado (gracias a las Naciones Unidas) cierto avance en la difusión
de información sobre las nuevas tecnologías  y en la promoción de sociedades de financiación  en los países en desarrollo, muchos países siguen al margen de las inversiones del sector privado y de las tecnologías que éstas pueden aportar. Sin embargo, el período extraordinario no abrió ningún nuevo camino en este tema.

viernes, 21 de mayo de 2010

jueves, 20 de mayo de 2010



TECNOLOGIA ECOLOGICA ...


Las tecnologías ecológicas son una herramienta clave para la  ejecución del Programa 21. El veloz crecimiento de los mercados de las tecnologías de etapa final y de producción menos contaminante confirma que las industrias y las empresas se están empeñando en introducir estas tecnologías, con excelentes resultados. No obstante, como se confirmó durante el período extraordinario de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas en junio de 1997, aún existen graves problemas ambientales, y persisten grandes  escollos que dificultan la adopción generalizada de las tecnologías ecológicas, principalmente en los países en desarrollo. Si se quiere lograr avances significativos habrá
que salvar estos escollos.


éstas “protegen al medio ambiente, son menos contaminantes, utilizan todos los recursos en forma más sostenible, reciclan una mayor
proporción de sus desechos y productos y  tratan los desechos residuales en forma más  aceptable que las tecnologías que han venido a sustituir”. El Programa 21, adoptado en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, instó a los gobiernos y a otros entes clave a crear nuevos mecanismos
de financiación para acelerar la transferencia de las tecnologías ecológicas de los países “ricos”, principalmente los países industrializados,  a los “pobres” del mundo en
desarrollo. Se subrayó este punto instando a los ejecutivos  empresariales a otorgar “la más alta
prioridad” a la gestión del medio ambiente para alcanzar prácticas industriales sostenibles, urgiendo a las empresas y la industria a “crear
técnicas y tecnologías que reduzcan los efectos nocivos al medio ambiente” y recalcando que
“serán imprescindibles tecnologías nuevas y eficaces para aumentar la capacidad se habla de un  progreso importante, y de que varios países han  alcanzado un progreso notorio en contener la  contaminación y consumir menos recursos.  Además, el ritmo de degradación ambiental  en varios países en desarrollo ha sido más  lento que en algunos países industrializados  cuando éstos se hallaban en una fase similar  de desarrollo económico. Un factor importante en estas mejoras ha sido el aumento de las tecnologías ecológicas y de las técnicas de  producción menos contaminante

 


el avance hacia un futuro sostenible a nivel   mundial es, en términos generales, demasiado  lento, y se carece del sentido de urgencia
necesario. Persisten problemas ambientales graves: según el Banco Mundial, los problemas críticos son la contaminación del agua, la
contaminación atmosférica, la degradación  profunda de los suelos y los cambios atmosféricos.


  

Estos problemas afectan principalmente a las zonas urbanas, por lo cual, de lograrse la
sostenibilidad de las ciudades se estaría dando  un paso muy importante para alcanzar el
desarrollo mundial sostenible. Además, según el  PNUMA, el modo en que consumimos energía  en la actualidad requiere cambios profundos,  y las prácticas agrícolas modernas estánsobreexplotando los recursos del planeta.






El período extraordinario de sesiones de la

Asamblea General de las Naciones Unidas,
celebrada en junio de 1997, fue igual de incisiva en su análisis.   En ella se declaró que en la raíz del quehacer socioeconómico de naciones de todo el mundo persisten graves problemas

Aumenta el uso de las tecnologías  ecológicas

El período extraordinario de sesiones de
La industria de todo el mundo –y principalmente la de los países industrializados– está aplicando
cada vez más tecnologías ecológicas. Prueba de  ello es el crecimiento acelerado del mercado mundial para los procesos y servicios de cuidado ambiental, como los sistemas de
tratamiento de agua y de aguas servidas, el
manejo y el reciclado de desechos, el control de la contaminación atmosférica y la reducción
de ruidos. Está aumentando un 5% anual y
se prevé que, para el año 2000 alcanzará
como mínimo un total anual de 300.000 millones
de dólares. Según proyecciones del Programa de
las Naciones Unidas para el Desarrollo el
mercado mundial “ecológico” (incluidas las
tecnologías ecológicas que deben ajustarse a
normas ambientales obligatorias) ascenderá, en
el año 2000, a 500.000 millones de dólares.



Sostiene que gran parte de la tecnología ecológica más avanzada es producida por el sector privado y está en manos de éste. La
creación de un entorno propicio a través de medidas de apoyo fiscales y económicas, y de  un sistemapráctico de reglas ambientales y mecanismos de cumplimiento, tanto por parte de  los países desarrollados como de los países en desarrollo, podría estimular la inversión del sector privado en la creación de tecnología ecológica para transferirla a los países en desarrollo. Asimismo, apunta a un análisis de
nuevas maneras de intermediación financiera para costear tecnologías ecológicas, como
“líneas de crédito verdes”.
 

la Asamblea General elogia las asociaciones  entre el sector público y el privado (internas
e internacionales) entre países desarrollados y  países en desarrollo, y las califica como
esenciales para combinar las ventajas del sector  privado (es decir, acceso a financiación y  tecnología, eficacia de gestión, experiencia  empresarial y conocimientos de ingeniería) con la capacidad de los gobiernos de crear un entorno normativo propicio para que el sector
privado invierta en tecnología y se alcancen los objetivos del desarrollo sostenible a largo  plazo.